Una vida mal planeada.
Una nena muy traumada,
Estaba rota de verdad.
¿Y si esa mujer socialmente vista como puta quiere dejar de serlo? ¿Acaso tendrá que vendar sus estigmas toda la vida?
Una vida mal planeada.
Una nena muy traumada,
Estaba rota de verdad.
¿Y si esa mujer socialmente vista como puta quiere dejar de serlo? ¿Acaso tendrá que vendar sus estigmas toda la vida?
Yo le hablo a los arco iris. Me acuesto a dormir con el primer rayo de sol, cuando todo empieza. Mi canción de cuna es el sonido del trabajo del proletariado. Soy como una vampiresa. Y después vienen los llantos y los vómitos, cuando no puedo reivindicar una buena imagen. Si a mí no me importa ¿para qué mierda lo intento? Si lo que más feliz me hace es ver salir el sol con mi tecito en la mano con música de fondo que me inspire a escribir o a tejer. Si el mejor sentimiento que puede haber entre dos personas es el amor (en cualquiera de todas sus variantes).
Tengo un mes de enero para viajar. Sonrisas, besos, caramelos y todo eso que suena tan cursi que apesta. Y sí, los voy a usar. No con quién planeaba pero los voy a usar igualmente, con la frente en alto y el humor hasta el cielo. Descubriendo la magia de cada momento. Haciéndole el amor a mi única vida. Cuidándola como lo que es. Disfrutándola como lo que es.
No hay que castigar las conductas autodestructivas de los adolescentes sino apoyar las constructivas.
Esclavos poseidos, muñecos, craneos huecos, podridos, lo noto en los ojos que hay detras de esa bufanda en la que estais escondidos, mala hierba crece rápido, mi voz es la hoz, corta de cuajo seres ácidos, esclavos esposados, maltratados por mis versos y entallados en tu falsa frente aria, con rabia, con furia, con desprecio, poniendo precio al necio que fue siempre el marginado del colegio, ignorado, sin educación básica, tomo medidas drásticas, se colocó la esbastica, lanzó su brazo arriba y sintió ser importante, decidió vengar su odio destruyendo aquello que tenía delante, ves esclavos en grupo o no ves a ninguno, imponen su fuerza siempre 15 contra 1, arropados por su bando, ellos siguen cazando creen que tienen el mando y en el fondo son blandos, chocan con lo diferente, se asustan, se atrgantan, convaten su miedo pisando caras y gargantas, todo esto tiene gracia, y lo más descojonante es que el domingo en el estadio aplauden a los inmigrantes. |
Partir
en cuerpo y alma
partir.
Partir
deshacerse de las miradas
piedras opresoras
que duermen en la garganta.
He de partir
no más inercia bajo el sol
no más sangre anonadada
no más formar fila para morir.
He de partir
Pero arremete ¡viajera!